La fuerza del viento

Hoy bici ha empezado pesada. Me encontraba muy fatigado de cabeza. He dormido menos de 5 horas y el curro es mentalmente agotador (tardaré en hacerme con él). Quería dejar lo de hoy, consolarme en el "ya lo haré mañana" para pensar que no comienzo a saltarme entrenos (más aún porque el de hoy era suave). Ha sido un alivio que la tarde estuviera nublada, pues el calor hubiera sido más chafante. Soplaba un vientecito que ralentizaba mucho en cada tirada de bajada en dirección a la playa y ayudaba bastante en las tiradas hacia arriba. Hacia la mitad de la sesión el cuerpo era cada vez más viento y las piernas las aspas que giraban a su son, igual que las torres eólicas. Al final he vuelto casi con más energía que la que me he ido... paradojas del deporte.

PD: mañana paso facturación de mi cuarta semana, que seguro ha bajado porque he iniciado nuevos proyectos que me han quitado bastante tiempo.